Cada gol que marca, más le aleja de Palma. Así están las cosas
con Güiza, cuyo ritmo goleador no encaja con un equipo de las
aspiraciones del Mallorca. Lo sabe Grande, el presidente,ya resignado a
no contar con su fichaje estrella. Y lo sabe el propio Dani, aunque se
sepa de memoria la respuesta políticamente correcta: “Tengo tres años
de contrato y estoy muy feliz en Palma”. Lo que sí es cierto es que su
nombre sigue estando sobre la mesa de equipos importantes.