EL EQUIPO ANGLO-ALEMÁN NO DA SÍNTOMAS DE MEJORÍA
La escudería BMW, pese al ocultismo extremo que les caracteriza en los entrenamientos, está dando síntomas muy preocupantes para Ferrari y McLaren, sus más directos rivales en este inicio de campeonato. Comentaba hace pocas fechas Ron Dennis que no temía por la teórica segunda plaza de la parrilla y que su evolución sería muy buena en Barcelona, pero tras tres días de pruebas, parece que tienen motivos de preocupación.
Uno de ellos, el principal, es que Heidfeld rodó el martes con un solo juego de neumáticos nuevos y el resto de la jornada aprovechó gomas usadas para completar 90 vueltas al final del día. Con unos neumáticos extremadamente desgastados y en los últimos minutos, el alemán logró un notable 1.20.9 pese a que su carga de combustible debía ser alta.
Podría ser mejor
"En la pretemporada sabíamos que estábamos muy bien, pero no pensábamos que tanto", comenta Heidfeld. "Hemos sido el segundo mejor equipo y lideramos el Mundial. Hace dos meses no lo hubiéramos creído", asegura. Nick lanza un aviso a navegantes: "Aún podría ser mejor".
La impresión es que Hamilton está anclado en tiempos similares a los de febrero en esta pista, mientras que BMW, con nueva aerodinámica que afecta al alerón delantero y una nueva tapa del motor, va a seguir progresando. El equipo alemán, con Kubica, probó después la configuración de 2009, dejando claro que la preparación para Barcelona ya está lista. Una victoria no es más que cuestión de tiempo.